Polonia en Chile

Estimadas Señoras,

Estimados Señores,

Compatriotas y amigos chilenos de Polonia,

El mes de mayo está repleto de aniversarios importantes para nuestra historia, los que, a diferencia de los de diciembre, celebramos en lugar de conmemorar. El "diciembre polaco", como se suele denominar este mes en el periodismo histórico, se asocia sobre todo a la bestial represión de los levantamientos polacos por la libertad por parte de la dictadura comunista.  La masacre en la costa y la imposición de la ley marcial son acontecimientos de la historia reciente de Polonia que forman parte del trágico destino de nuestra patria.

La aprobación de la Constitución del 3 de Mayo, hace 230 años, tiene una dimensión completamente diferente para nosotros. "Viva el Sejm, viva la Nación, viva a todos los Estados ", pues quién mejor que el profetisa y testigo de la época sabía que se trataba de un acontecimiento tan trascendental como alegre. Preocupado por el destino de Polonia y en el espíritu de la Ilustración, el Gran Sejm aprobó una ley que combinaba la tradición con la modernidad. Pasó a la historia como la segunda Constitución del mundo y la primera de Europa que estableció los principios de un Estado democrático basado en la división tripartita del poder.  El hecho de que el régimen comunista prohibiera la celebración de este aniversario y reprimiera brutalmente todos los intentos de eludir esta prohibición es testimonio de su dimensión liberadora.

Después de que Polonia recuperara su soberanía en 1989, la decisión del 1 de mayo de 2004 de unirse a la Unión Europea fue de vital importancia para su desarrollo.  Después de 17 años, nuestro país desempeña un papel importante en la elaboración de las políticas comunitarias en todos los ámbitos y la pertenencia a la UE ha acelerado los procesos de modernización y reforzado nuestra posición en el mundo.

Desde hace 19 años, la comunidad polaca y los polacos en el extranjero tienen su propia fiesta.  Establecido por el Sejm el 2 de Mayo, es un reconocimiento de los logros y contribuciones de la comunidad polaca y de los polacos en la recuperación de la independencia y el cultivo de las tradiciones en países extranjeros. A menudo obligados a abandonar su patria, nuestros compatriotas dieron ejemplo de actitudes patrióticas y marcaron de forma activa y creativa el destino de los países en los que vivían.  Para la Polonia chilena un modelo incuestionable de tal actitud fue y sigue siendo Ignacio Domeyko - un patriota, científico y excelente organizador.  El destino también envió a Chile a muchos otros, como Raúl Małachowski, Ewa Odachowska, Henryk Kaczor, Jerzy Dziekoński, Michał Kurasz, Dawid Fajersztein, Józef Hosiasson y Alicja Cięciwa.

La diáspora polaca y los Polacos en el Extranjero siempre han sido y serán los mejores embajadores de Polonia, tratando el patriotismo como un deber cotidiano.  No olvidemos que los extranjeros ven a Polonia principalmente -y a veces exclusivamente- a través del prisma de las actitudes y características de los polacos con los que tienen contacto diario.

También el 2 de Mayo celebramos el Día de la Bandera, que es un símbolo de la estatalidad polaca.  Sus colores simbolizan la lealtad, la nobleza, la valentía y el sacrificio, cualidades con las que nosotros, los polacos, nos identificamos.

Les deseamos a todos un "Mayo Polaco" en Chile, esperando que esta sea la última celebración "a distancia", y que pronto podamos reunirnos, tradicionalmente, en nuestra Embajada.