Polonia en Chile

Los „Acuerdos de Agosto”, concretados en 1980 tras conversaciones entre los representantes de trabajadores huelguistas de casi 170 fábricas y las autoridades comunistas, fueron un elemento más de la lucha de polacos con la dictadura impuesta al país como consecuencia de lo acordado durante la Conferencia de Yalta.  Al igual que durante los estallidos por la libertad de octubre de 1956, de marzo de 1968, de diciembre de 1970 y de junio de 1976, el gobierno comunista apoyado por la Unión Soviética intentó, a la fuerza, de poner freno a las aspiraciones libertarias de la sociedad polaca y anunció el estado de sitio el 13 de diciembre de 1981.

En 1980 la ciudad de Gdansk se convirtió en el símbolo, para el mundo democrático entero, de la persistencia y de la solidaridad, que llevaron a la caída de regímenes comunistas del llamado Bloque del Este.  Los héroes conocidos y menos conocidos de aquel tiempo crucial para la historia del mundo, no se doblegaron frente al poder del mal sobre el cual hablaba el papa Juan Pablo II en sus homilías. El lema de la “Solidaridad”, primer sindicato libre en los países de atrás de la “Cortina de hierro”, fue “Combate el mal con el bien”, el principio reiterado en los sermones del padre Jerzy Popiełuszko, bestialmente asesinado por los aparatos de fuerza del estado.

La postura firme de miles de militantes de la “Solidaridad”, quienes en los años 1981-1988 construyeron estructuras clandestinas de resistencia contra del régimen comunista, llevaron a conversaciones de la Mesa Redonda en 1989, cuyo resultado selló el desmantelamiento final del sistema inhumano impuesto a Polonia después de 1945.

Los cambios al sistema político que resultaron de los “Acuerdos de Agosto”, se llevaron a cabo en Polonia de manera pacífica lo que ganó consideración del mundo entero. Lech Wałęsa, quien aparte de Anna Walentynowicz, Andrzej Gwiazda, Bogdan Borusewicz, Tadeusz Mazowiecki y Bogdan Lis, jugó el papel clave en la fundación de la Solidaridad, fue galardonado en 1983 con el Premio Nobel de la Paz.

La reconstrucción de las instituciones democráticas en Polonia coincidió con el proceso de la democratización de la vida política en Chile, proceso que se inició con el referendo del 5 de octubre de 1988 y cuyo resultado fue decisivo para su forma actual.

La revolución de la “Solidaridad” es una etapa más de la historia de Polonia de la cual los polacos siempre permanecerán orgullosos.